Servicio de estudios: Colaboraciones
04-12-2005

Deducciones en la Renta

Todos los años, el mes diciembre nos da una última oportunidad para disminuir la cuota a pagar en la declaración de la renta y, para aprovecharla, una buena alternativa consiste en realizar aportaciones a un plan de pensiones. Durante este fin de año, estamos asistiendo a una auténtica subasta entre entidades para captar aportaciones y fondos de pensiones de los ahorradores. Utilizan para ello campañas de lo más variopinto, ofreciendo cantidades en efectivo, regalos de todo tipo y si hace falta, hasta un jamón.

Pero no debemos dejarnos impresionar por esto. Analicemos despacio las condiciones de las ofertas, qué compromisos adquirimos y, sobre todo, pensemos que, en los planes de pensiones como instrumentos de ahorro a largo plazo, la seguridad y la rentabilidad son fundamentales. Asimismo, es importante que realicemos nuestras aportaciones de forma periódica, preferiblemente mensual, con el fin de seguir una disciplina en el ahorro y minimizar los efectos de las fluctuaciones de los mercados de valores.

Hemos de considerar que, en el momento de la jubilación, más de la mitad del importe de nuestro plan de pensiones debería proceder de la rentabilidad y que este patrimonio ha de servir para completar nuestra pensión y permitirnos mantener nuestro nivel de renta.

Para ello, procuraremos elegir una entidad que sea de absoluta confianza, cuyas rentabilidades y éxitos obtenidos sean una garantía de buena gestión y cuyos profesionales nos asesoren en la elección del fondo más adecuado, en función de nuestra edad y perfil inversor.

A TENER EN CUENTA:
Los planes de pensiones, por su excelente tratamiento fiscal, son los instrumentos más adecuados para el complemento de nuestras pensiones. Dado que son una inversión a largo plazo, la seguridad y la obtención de una buena rentabilidad son fundamentales, y no los regalos promocionales que pudieran ofrecernos.

José Manuel Carnicer Rodrigo (jmcarnicer@ibercaja.es). Ibercaja Pensión. Heraldo de Aragón, 4 de diciembre de 2005


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