Tormenta de verano

El sol sigue brillando con fuerza en la economía internacional. El PIB mundial crece algo más de un 4% anual y los mercados bursátiles continúan escalando, con algún respiro en el camino, hacia máximos. De este modo, la renta variable encadena tres años excelentes y comienzan a recuperarse los techos alcanzados antes del estallido de la burbuja tecnológica.

No obstante, como ocurre con frecuencia en días de calor, comienzan a otearse en el horizonte algunas nubes que pueden hacer variar la situación. Los problemas de diversa índole en la oferta y el vigor de la demanda están impulsando al precio del barril de petróleo de calidad brent por encima ya de los 70 dólares. Si no se modera esta tendencia, el impacto sobre la inflación acabará llegando. Y si el IPC en la zona euro se dispara, ya sabemos lo que conlleva: el Banco Central Europeo aceleraría las subidas de tipos de interés. El endurecimiento de la política monetaria, con alzas de tipos a un ritmo mayor del previsto, enfriaría el despegue de nuestros socios europeos y obligaría a apretarse el cinturón a las familias con préstamos hipotecarios, reduciendo su capacidad adquisitiva para consumo.

En este contexto, tendremos que prestar especial atención a la evolución del crudo hasta el verano. Así nos podremos preparar para poner a tiempo nuestros ahorros a cubierto si finalmente se confirma la temida tempestad en forma de tercer shock petrolífero, conscientes de que una de las principales características de las tormentas es que suelen desencadenarse con rapidez.

Enrique Barbero Lahoz (ebarbero@ibercaja.es). Ibercaja. Heraldo de Aragón, 30 de abril de 2006

A TENER EN CUENTA
El sol sigue brillando con fuerza en la economía internacional. No obstante, comienzan a otearse en el horizonte algunas nubes que pueden hacer variar la situación. Prestando especial atención al crudo, tendremos que poner a cubierto nuestros ahorros si finalmente se confirma la temida tormenta en forma de tercer shock petrolífero.