La economía inmersa en un mar de dudas
Finalizado el primer trimestre del ejercicio, la economía mundial se encuentra en un punto de inflexión aunque no se puede afirmar con total certeza si es al alza o a la baja, ya que la situación no es la misma en los diferentes bloques económicos.
Por el lado positivo, los países emergentes continúan presentando elevados crecimientos y se han consolidado como un bloque clave de futuro en la economía mundial. Sin embargo, no hay que olvidar que también se ven afectados por la crisis mundial y han rebajado las previsiones de crecimientos para 2012. Asimismo, la economía americana está reactivándose gradualmente y se espera cierre el año con un avance del 2,5%. No obstante, los indicadores adelantados del primer trimestre son mixtos, ya que, aunque los de consumo reflejan optimismo, la actividad en los sectores de industria y construcción residencial mantienen un tendencia contractiva. Esta situación ha llevado al Presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke a prometer nuevos estímulos monetarios si es necesario.
Por el lado negativo, Europa continúa en crisis y la Comisión Europea ha rebajado sus previsiones para la eurozona al -0,3% en 2012 debido a la caída de la actividad y del empleo. Además, los rigurosos planes de ajuste de déficits públicos puestos en marcha pueden truncar cualquier atisbo de recuperación.
Con respecto a España, esta semana el Banco de España ha confirmado que la economía, en el primer trimestre del año, ha entrado en recesión por segunda vez desde que comenzó la crisis en el verano de 2007 y que la destrucción de empleo continúa. Además, nuestro país se ha colocado en el ojo del huracán como consecuencia del retraso de la presentación de los presupuestos, lo que ha avivado los temores sobre la capacidad del país para cumplir con el adelgazamiento del déficit sin abocarse a una profunda recesión.
De esta forma, las crecientes dudas sobre la economía española están pasando factura en el parqué. El Ibex no levanta cabeza y esta semana se ha situado por debajo de los 8.000 puntos, una barrera que no perdía desde el mes de noviembre del año pasado. Es además el único entre los principales índices internacionales que se encuentran en terreno negativo en el año.
En resumen, la economía mundial está inmersa en un mar de dudas pero hay que confiar en que se pondrán en marcha reformas inteligentes que harán que la economía y los mercados regresen a una etapa de mayor prosperidad y estabilidad. Sin embargo, soy realista y pienso que estamos más cerca de encontrar el rumbo adecuado que de llegar a la meta.
Arantxa Gimeno Sanz (magimeno@ibercaja.es). Ibercaja. Heraldo de Aragón, 1 de abril de 2012
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