La cautela domina los mercados
Después de un comienzo año en el que imperaba el optimismo, dando por sentado que 2014 era el año de la recuperación definitiva, los mercados despidieron enero a la baja y han iniciado febrero con nerviosismo e incertidumbre. Así, las dudas en torno a la debilidad economía mundial y la cautela de los inversores están marcando el devenir de las bolsas.
La tormenta desatada en los países emergentes ha pasado factura en los mercados, imprimiendo una volatilidad que puede continuar. Los problemas de crecimiento que arrastran algunos países, la dificultad de captar financiación barata en los mercados de capitales y el fin de los estímulos cuantitativos en EEUU, que afecta a mercados más sensibles a las condiciones de liquidez, son algunos de los riesgos en el horizonte más cercano. No obstante, los expertos opinan que continúa existiendo valor en emergentes, pero hay que ser más selectivos.
Desde el otro lado del atlántico, tampoco llegan buenas noticias y los últimos indicadores económicos han decepcionado. El déficit comercial continúa en aumento y los pedidos industriales y del índice ISM manufacturero han frenado su avance.
En Europa, esta semana los mercados estuvieron pendientes del esperado anuncio por el BCE de nuevos estímulos monetarios para evitar la deflación e impulsar la reactivación económica. Sin embargo, el presidente del BCE ha dicho que no hay deflación, sino un ajuste de precios relativo, ha mantenido los tipos en el 0,25% y ha aplazado posibles nuevas medidas a la reunión de marzo cuando se revisarán sus previsiones macro.
En España, los últimos datos de coyuntura parecen confirmar el cambio de ciclo de la economía, aumento de la inversión exterior y de las exportaciones entre otros, y las previsiones para la Bolsa española en 2014 son positivas, aunque con cautela porque el avance será menos tendencial y más inestable que en 2013.
Arantxa Gimeno Sanz (magimeno@ibercaja.es). Ibercaja. Heraldo de Aragón, 9 de febrero de 2014
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