Crudo, salarios, ralentización ... y otros temas del montón
¿Todos tenemos un precio? No lo se, lo que sí está claro es que el precio marca las decisiones de nuestras vidas y de la economía.
Un nuevo término ha sido acuñado: indeflación. Éste define el fenómeno por el cual, los activos financieros se ven presionados al alza mientras que los bienes de consumo lo hacen a la baja... ¿magia? Si, el mejor truco de los magos de los bancos centrales.
Desde el mes de junio hemos visto cómo el crudo retrocedía más del 20%. Pero no es la única materia prima que ha sufrido caídas en 2014 (trigo, soja o maíz). Los precios se establecen por la oferta y demanda; éstos caen por menor demanda o mayor oferta.
Es complicado dilucidar las razones que justifican los movimientos del petróleo, ya que no todas tienen que ver con la economía real. Sin embargo, a raíz de lo visto en otros materiales básicos no parece descabellado pensar que la ralentización de la demanda puede ser una de ellas.
A principio de año Draghi comentaba que el ajuste de precios era necesario para mejorar la competitividad, al menos en la periferia. Si caen los salarios, lo hace la renta disponible, y con ello la demanda del consumidor, por lo tanto menores precios y menor crecimiento.
Según la teoría económica, la deflación lleva consigo posponer decisiones de compra a la espera de precios más bajos. Supone además, que la deuda sobre PIB se incremente.Las empresas en este entorno retrasan sus decisiones de inversión
Un círculo por tanto más que vicioso. Por si fuera poco, con niveles bajos de inflación y tipos de interés, se está dispuesto a pagar más por los activos financieros, cuyos precios, como hemos comentado al principio llevan tiempo subiendo. Menuda movida financiera la que tenemos, queda por ver cómo nuevas medidas no convencionales salen de la chistera de nuestros magos para frenar eso de la indeflación.
Mª José Martínez Blázquez (mjmartinezb@ibercaja.es). Ibercaja Patrimonios. Heraldo de Aragón, 23 de noviembre de 2014
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