Ibercaja
Pescar en Ibex revuelto
Santiago Martínez Morando, Heraldo de Aragón
Desde abril del año pasado, cuando alcanzó los 11.866 puntos, el selectivo español ha perdido un 35%. A primera vista, esta evolución no parece coherente con la aceleración del crecimiento del PIB hasta el 3,5% interanual, la notable creación de empleo o la mejora de la confianza que hemos vivido desde los tiempos oscuros de la crisis. Pero ya sabemos que en la bolsa la realidad nunca es sencilla. La subida del Ibex hasta abril podría haberse precipitado hasta llevarlo a una valoración excesiva, y hay que analizar las perspectivas de crecimiento y beneficios para los próximos trimestres.
Las previsiones para la economía española siguen siendo favorables, pero se temen las repercusiones de la nueva situación política. Además, el entorno internacional, con la desaceleración de China y buena parte del mundo o el desplome del precio de las materias primas, está cargado de incertidumbre.
En esta coyuntura, y con fuertes caídas y elevada volatilidad en los activos de riesgo, cuesta apostar por la renta variable, pero cabe preguntarse si el castigo no ha sido excesivo e indiscriminado, y pensar en la labor de esos inversores que saben moverse en aguas turbulentas para encontrar oportunidades. Son mundialmente célebres los ejemplos de Warren Buffet o George Soros. En mi familia el buen pescador era mi abuelo, que solía decir que había ganado más dinero en la bolsa ya jubilado que en cuarenta años dirigiendo su fábrica de hormas. Quizá, entre los lectores de este periódico, también haya inversores intrépidos que tengan ese talento.
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