Servicio de estudios: Colaboraciones
10-01-2022

Brío cíclico en el inicio de 2022

Miriam Fernández. Heraldo de Aragón

Arrancamos el 2022 con un fuerte repunte en los tipos de interés de la deuda americana y de la pendiente de la curva y, con él, la revalorización de sectores cíclicos (ocio, financieras, automóviles y materias primas) y del factor “valor”. Por el contrario, los defensivos (salud, electricidad) y el factor “crecimiento” han cedido terreno. De hecho, la víspera de Reyes, el factor “crecimiento” tuvo su tercer peor comportamiento relativo frente al factor “valor” y también frente a “calidad” de la última década. China continua la estela de debilidad de 2021, destacando la abrupta corrección en innovación tecnológica.

De cara los próximos meses seguimos positivos en renta variable pues el buen tono de los beneficios empresariales debería sorprender positivamente, si bien la volatilidad permanecerá elevada dada la existencia de riesgos como la persistencia de los cuellos de botella en las cadenas de suministro, la ralentización del consumo de bienes, el crecimiento de la economía china, la estanflación, el ritmo de subidas de tipos en EE. UU. y reducción del balance, todo ello con el actual telón de fondo sociosanitario. Recientemente, los indicadores adelantados de manufacturas a ambos lados del Atlántico perdieron terreno, pero continúan en fase de expansión. 2022 se proyecta como otro año de crecimiento por encima de tendencia y, por primera vez desde 2016, se espera que sea mayor para la Eurozona que para EE. UU. China podría encontrar soporte en su valoración atractiva.

Volver