IBERCAJA MEJORA UNA DÉCIMA SUS PREVISIONES DE CRECIMIENTO DE LA ECONOMÍA ARAGONESA Y ESPAÑOLA, HASTA EL 2,9% Y EL 2,3%, RESPECTIVAMENTE, PARA 2026

Ibercaja ha presentado sus previsiones de crecimiento económico para el año 2026, revisando al alza una décima el incremento del PIB en Aragón, hasta el 2,9%, y el de España, hasta el 2,3% y pronosticando que el ejercicio 2025 acabará con un crecimiento del 2,7% y del 2,8%, respectivamente, en Aragón y en España (frente al 2,8% para Aragón y el 2,7 % para España publicado en el último análisis de mayo).

Tal y como han explicado Enrique Barbero, director de Comunicación, Marca y Relaciones Institucionales de Ibercaja, y Santiago Martínez, jefe de Análisis Económico y Financiero del Banco en la presentación del nuevo número de la Revista Economía Aragonesa, “la coyuntura económica continúa siendo positiva para Aragón, si bien, las nuevas estimaciones del INE y la AIReF muestran que el dinamismo del PIB está siendo algo inferior al promedio nacional en los últimos años” y han añadido que “según las figuras per cápita, el desempeño aragonés es muy favorable, superior a la media y con un papel destacado entre las regiones más ricas”.

Los expertos de Ibercaja han trasladado que la diferencia en el crecimiento del PIB se debe, por tanto, a una evolución demográfica aragonesa menos expansiva que en el promedio nacional. Sin embargo, esta divergencia podría haber comenzado a subsanarse, ya que la población ha pasado a crecer más en Aragón que en el conjunto de España, siendo la segunda región con un mayor crecimiento anual tras la Comunidad Valenciana.

Barbero y Martínez han afirmado que se necesitarán más datos para confirmar esta nueva tendencia, inaudita en las últimas décadas, pero el cambio no parece casual al coincidir con la puesta en marcha de los ambiciosos proyectos de inversión anunciados en los últimos años con protagonismo de los centros de datos, la gigafactoría de baterías y la industria agroalimentaria.

Las condiciones más favorables del mercado aragonés de la vivienda explicarían que una mayor accesibilidad podría estar impulsando también el flujo inmigratorio hacia Aragón, protagonizado sobre todo por población extranjera.

En este contexto, las perspectivas de crecimiento del equipo de Ibercaja apuntan algunas consideraciones relacionadas con las importaciones, el sector de la construcción y el alza de precios de la vivienda.

Así, se prevé que el fuerte impulso inversor tendrá un importante componente importador, en la gigafactoría de baterías o el equipamiento tecnológico que requerirán los centros de datos, de forma que la aportación al PIB será limitada ante un probable deterioro adicional del déficit comercial en bienes de equipo.

Además, en la primera fase de estos proyectos, el sector de la construcción tendrá un papel protagonista, lo que conlleva dos problemas, según los expertos. Por una parte, que el aumento de la demanda de trabajadores será en buena medida temporal y se irá reduciendo conforme se pongan en funcionamiento los centros de datos a finales de esta década. Por otra, que este incremento de la demanda de trabajadores entra en conflicto con el requerido por la construcción residencial, que sigue necesitando incrementar su capacidad productiva cuando se inician al año menos de la mitad de viviendas de las necesarias para atender el incremento del número de hogares que, además, podría ser mayor al previsto si se confirma la aceleración poblacional.

En tercer lugar y en relación con lo anterior, los expertos señalan que, aunque el punto de partida fuera más favorable que en otras regiones, las subidas de precios de la vivienda en Aragón comienzan a ser preocupantes, teniendo en cuenta que el problema de escasez de oferta no se va a solucionar a corto plazo.

El equipo de Ibercaja también destaca que, aunque la guerra arancelaria desatada por Estados Unidos está teniendo un impacto limitado en el crecimiento mundial, las tensiones geopolíticas serán probablemente una constante en el próximo ciclo. “Existen otras fuentes de incertidumbre que conviene tener presentes, como la situación de un sector del automóvil que, más allá de presentar datos algo incongruentes en la balanza comercial aragonesa, se enfrenta a un complicado entorno de cambios tecnológicos y fuerte competencia china, o como algunos desequilibrios que amenazan la estabilidad financiera mundial, como el que presentan las cuentas públicas de algunos países, en particular Estados Unidos”, apuntan.

Monográficos: las relaciones económicas entre China y Aragón, el impacto de la IA en el mundo laboral y el sector del metal aragonés

El primer artículo monográfico de esta edición, elaborado por Javier Camo y Katharina Morman, director gerente de Aragón Exterior y directora de comunicación de la empresa pública, profundiza en las relaciones económicas entre China y Aragón, subrayando las oportunidades y desafíos que representa la mayor potencia comercial del siglo XXI. Aragón se ha consolidado como destino de inversiones chinas en automoción, especialmente en movilidad eléctrica, con proyectos que superan los 4.000 millones de euros y generan miles de empleos.

Paralelamente, el sector cárnico aragonés ha encontrado en el mercado chino una vía de expansión relevante, aunque condicionada por las tensiones proteccionistas y por una competencia creciente. El intercambio comercial es intenso, con más de 2.700 millones de euros y un fuerte desequilibrio hacia las importaciones, especialmente de bienes de equipo y manufacturas de consumo. Este escenario confirma que la comunidad participa activamente en las nuevas cadenas de valor globales, pero también evidencia la importancia de una estrategia clara para reducir dependencias y maximizar beneficios.

El segundo monográfico profundiza en la transformación del mercado laboral ante la irrupción de la inteligencia artificial. Ha sido realizado por Lluis Quetglas, CEO de Vecdis, Fernando de Santos, coordinador de IAON en Ibercaja y Marta Soriano, analista de inteligencia especializada en temas de innovación, sostenibilidad y tecnología. La tecnología no destruye empleo en su conjunto, pero sí reconfigura funciones y exige nuevas habilidades, impulsando un modelo de cooperación entre humanos y máquinas. La actualización continua de competencias, el upskilling y el reskilling se convierten en estrategias indispensables para sostener la productividad y evitar la obsolescencia de profesiones tradicionales. Aragón y España se encuentran en un punto de inflexión: la capacidad de integrar la IA en procesos productivos y de generar talento especializado determinará su competitividad futura.

El tercero de los monográficos, de los catedráticos de la Universidad de Zaragoza, Luis Lanaspa y Marcos Sanso, analiza con detalle el sector del metal, demostrando que su trayectoria ha sido clave para el crecimiento económico aragonés. Entre 2014 y 2024, el número de afiliados del sector ha aumentado de forma notable, con un peso cercano al 19% del total regional. La evolución del PIB sectorial, que crece más que la facturación, refleja importantes mejoras de eficiencia, especialmente en los años posteriores a la pandemia. Este comportamiento permite entrever que el metal seguirá siendo un motor decisivo para el posicionamiento industrial de Aragón y una base sólida para atraer nuevas inversiones vinculadas a la automoción, la producción avanzada y las energías renovables.

El número incorpora también la perspectiva periodística de la directora de Contenidos de la Cadena SER en Aragón, Eva Pérez, en cuyo artículo para la sección “Punto de mira”, titulado “Huevos de oro y millones digitales”, ofrece un contrapunto crítico a los discursos institucionales. El análisis recuerda que, mientras Aragón avanza hacia convertirse en un polo tecnológico con proyectos multimillonarios, las tensiones sobre el precio de la vivienda, la cesta de la compra y las condiciones laborales siguen marcando la experiencia económica de las familias.

Finalmente, la revista culmina con la sección de Visión Empresarial, dedicada en esta ocasión a la Bodega Pago Aylés. La trayectoria de esta bodega familiar es un ejemplo de cómo tradición, identidad territorial e innovación pueden converger en un proyecto competitivo. Desde su origen vinculado a la recuperación de un paraje histórico hasta su consolidación como productor internacional con presencia en decenas de países, la empresa muestra la importancia de la calidad, la sostenibilidad, la viticultura de precisión y la profesionalización en todas las áreas del negocio. Su transición hacia la certificación ecológica, su apuesta por mercados exteriores y su capacidad de adaptación tras la pandemia ilustran las claves de un crecimiento sólido en un entorno exigente.