Research Department: Collaborations
21-05-2018

ESCAPEMOS DE LA COMPLACENCIA EN MAYO

Miriam Fenández. Heraldo de Aragón

La reciente apreciación del dólar (6% frente al euro desde los mínimos de febrero) obedece a unos mejores datos macroeconómicos en EE.UU en el primer trimestre del año,  gracias a la política fiscal expansiva implementada por Trump que está permitiendo estirar al máximo el presente ciclo económico, el segundo más largo en la historia. Los beneficios empresariales allí están subiendo a ritmos interanuales del 25%, algo que no ocurría desde el tercer trimestre de 2010 y que, cuanto menos, sienta un precedente difícil de superar a futuro. Así es que la deuda, soberana y corporativa, de los países emergentes, ha sufrido recientemente, sobre todo en moneda local. No hay más que atender a la depreciación de la lira turca y el peso argentino frente al dólar en 2018, ambos países con déficit por cuenta corriente en torno al 5% del PIB y, por tanto, necesidad de financiación exterior.  No obstante, la relajación fiscal de Trump conllevaría presión bajista para el dólar en el medio plazo y daría alas a las bolsas emergentes. Mientras tanto, el tipo de interés de la deuda soberana a diez años en EE.UU. continúa su escalada, situándose ya en el 3,10%, pronunciándose el aplanamiento de la curva, señal de madurez de ciclo. La liquidez a nivel mundial está tocando techo al mismo tiempo que la volatilidad se encuentra de nuevo en mínimos. El defensivo oro corrige. Si bien el recorrido bursátil no está exhausto, mayo estacionalmente invita al descanso.
 
Miriam Fernández Jiménez. Ibercaja Gestión.
 
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